Todavía no.

''Majestuosa, mágica

infinita.

mi niña es

el sol

sobre la alfombra

al otro lado de la puerta

cogiendo

una flor !aja!

un viejo

''destruido en la batalla

emerge de su

silla

y ella me mira

y solo ve

amor,

!aja! , y me reconcilio

con el mundo

y respondo con amor

simplemente

como

estaba

previsto.''

Mas de cuatro veces he intentado contar esta historia, más de cuatro veces he plasmada en mi cabeza su inmensidad, pero no encuentro un punto de partida. La lógica del amor es confusa, la lógica de mi amor por ella lo es aun más. Despertar de un coma largo, irreal me hizo envolverme más en su alma. Sus manos como anclas a la vida, tomar la esencia mortal de los retazos que quedaban y ponerlos en orden, en marcha y hacerme enloquecer le resultó bastante fácil. Como un día quiso decirme ''sólo un valiente se arriesga a meterse en manos de un loco''; pues quisiera contarle que detrás del iris que me permite verla no hay ningún valiente. No soy mas que un cobarde que no quiso amarla desde el principio, desde que el destino me sonrío y ella se propuso robarme el equilibrio, despegarme del asfalto y ponerme a caminar sobre su ser. Soy un cobarde, que sabía que la estaba amando pero por no re acomodar los tonos monocromáticos de la cabeza no la tomó y dejo pasar el tiempo, perdiéndose de las mayores bendiciones que podría encontrar ¡Maldita cobardía! en el deambular del tiempo deje que unos mediocres que no supieron amarla le siguieron ajando el alma, malditos mediocres, que no supieron ver su fragilidad despampanante, su belleza enceguecedora, la tibieza de su alma, lo electrificante de su piel, lo embriagante de su aroma. Mediocres, que al final solo quisieron tomar su cuerpo y seguir siendo cúmulos llenos de los que está lleno el montón y que sin entender que sus almas corruptas no merecen tenerla siguen en intentos fallidos incompletos, mediocres. Llueve, escucho la lluvia, veo como cae y moja mi cigarro y sólo deseo que estuviera aquí, ha atrapado todos mis espacios. El viento corre tan deprisa, apaga las cenizas y me recuerda que no hay afán, ni porque maldecir a los mediocres, hay que agradecerles porque aquí está a mi lado o al menos eso me gusta pensar, agradecerles porque me hicieron entender que para amarla tengo dejarlo todo, nada está en el mismo lugar ni lo estará, hay que dejar los estándares, las creencias, las reglas y sobre toda la cobardía, aunque muera de miedo. Una luz alumbra en medio de la habitación, es ella diciendo ''Te amo mía'', ya lo sabe, sabe que soy suya, no como un objeto, no su propiedad, sólo como ella podría entender que le pertenezco, paro un segundo, cambia la canción y pienso en cuando con sutileza me planteo su duda de si estaba enamorada, ahora puedo responderle que enamorarme de ella sería perder la cordura en medio de sus grandes y brillantes ojos, pero su sonrisa, en sus manos, en su pecho, en su piel. Dejarlo todo ahí y no quererme marchar nunca, y entra esa voz que dice todavía no...cuando sea tuya, cuando pueda entender cuando dice que me ama, cuando sienta que su alma está tan envuelta en mi espiritu, cuando entienda que dice que es mía y pueda subir a la torre mas alta de este reino y gritar que tengo el tesoro más grande en el baúl de mi bote y como un buen marinero irme navegando lejos con ella, con su locura que me atrapa con su todo que es mi revolución. La extraño cada segundo que su aire no toca mis sentidos, pero estoy lista, lista para llevármela y que tal vez algún día entienda que desde hace tanto la amo que ya no necesitará nada más...